Consecuencias de una mala adquisición

    Debemos tener en cuenta que una mala capacidad auditiva puede ser perjudicial para el niño o la niña, tanto social como fisiológicamente, pero es importante saber también que una mala adquisición auditiva no afecta a la capacidad intelectual; simplemente aparecen dificultades a la hora de aprender y desarrollarse (GAES junior, 2011). A continuación os expondremos algunas de las posibles consecuencias que podremos observar debido a una mala adquisición.

    Consecuencias sociales:

• El niño responde con irregularidad a los estímulos auditivos. A veces reacciona, otras parece no hacer caso. No siempre entiende lo que se le dice.
• Se acerca al hablante en un gesto de oír mejor.
• Busca la cara del que le habla para entenderlo mejor.
• Participa poco en las actividades de la clase o interrumpe y llama la atención.
• En clase es inquieto, distraído y con tendencia a molestar a sus compañeros y bajo rendimiento escolar.
• Se muestra agresivo y con tendencia al aislamiento.
• Discapacidad auditiva.
• Limitación en la capacidad para comunicarse con los demás.
• Alteraciones en el desarrollo.    

    Consecuencias fisiológicas:

• Dificultad en la discriminación de sonidos vocálicos y consonánticos.
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  Alteraciones en la calidad del tono o en la intensidad de la voz; anomalías en el ritmo o la entonación…que hacen el lenguaje poco comprensible 
• Diversidad de niveles en la calidad de la lectura labial, desde niños que la tienen excelente, hasta los niños que la tienen mala o muy mala. Constituye un magnífico instrumento para la comprensión de la conversación. 
• Pobre comprensión auditiva y expresión comunicativa. No todos los niños responden del mismo modo. A veces comprende más de lo que puede expresar, pero en general, a más comprensión, mejor expresión. 
• Uso de un lenguaje infantil empobrecido.
• Limitado acceso al lenguaje escrito y la comprensión lectora.
• Retraso en el desarrollo del habla.
• Mala pronunciación.